sábado, 14 de noviembre de 2009

Entrevista: Hermanitas de los Ancianos Desamparados – Asilo de Ancianos en Piura


Muchas jóvenes han visto la labor que realizan las Hermanitas de los ancianos desamparados y han tenido la inquietud de querer servir a los más necesitados. Ellas empiezan a conocer la misión de esta congregación viviendo en la comunidad por un periodo de tiempo, y si sienten el llamado a esta vocación, ingresan a alguna de las casas de aspirantado.
Actualmente en el asilo de Piura, 11 jóvenes están conociendo la labor de la congregación mientras que 100 ya están discerniendo la vocación en las casas de aspirantado.
Casa de Trujillo
40 aspirantes.
Casa de Cajamarca
30 aspirantes.
Casa de Arequipa
30 aspirantes.
A continuación les ofrecemos una entrevista realizada a la superiora de la congregación, Hermanita Evangelina Muñoz Terrones.

Prensa: ¿Hace cuánto tiempo se encuentran en Piura? ¿Cuántas personas conforman la comunidad?

Sor Evangelina
: La congregación en Piura se encuentra 50 años y somos 9 religiosas.

Prensa: ¿Quién es el fundador y cómo surge la congregación? ¿En qué lugares se encuentran?
Sor Evangelina:
Los fundadores son Santa Teresa de Jesús Jornet y el Siervo de Dios, D. Saturnino López Novoa, que empezaron la congregación en Valencia, España el año 1873.
Tenemos muchas casas en España, en América Latina y últimamente en Asia.
En Perú estamos en Lima, con dos casas de retiro (camino a Canta), y congregaciones en Arequipa, Trujillo, Cajamarca y Piura
¿En qué consiste la labor que realizan? ¿Cuál es su carisma y apostolado?

Sor Evangelina: Nuestra misión como religiosa es nuestra vida consagrada a Dios y luego nuestra misión con los ancianos es atenderlos especialmente a los más pobres y abandonados.
El fin es sanar sus cuerpos para poder salvar sus almas, que es lo que nos recomendaba nuestros fundadores.
Les damos toda la atención que necesitan desde que se levantan, ayudándo a los que no pueden pararse por sí mismos, les hacemos la limpieza de las habitaciones y todos los cuidados directos con el anciano.

Prensa: ¿Qué significa ser Hermanitas de los ancianos desamparados?

Sor Evangelina: Nuestro fundador quiso que nos llamásemos hermanitas, porque nos decía que debíamos considerarnos como las sirvientes de los ancianitos.
Así como en una casa a los más pequeños les decimos hermanitas, así nosotras debemos ser las más pequeñas para servir.

Prensa: ¿Cómo es un día en la vida de una hermanita de los ancianos desamparados?

Sor Evangelina: Un día… en algo varía en cada congregación. Pero un día acá en la casa de Piura: nos levantamos a las 4:30 de la mañana, rezamos Laudes y luego tenemos una hora de oración personal. Continuamos con la Santa Misa. Hacemos nuestra oración primero para ofrecer a Dios nuestro trabajo del día.
Y luego empezamos con nuestra labor con los ancianitos.
Claro que durante el día tenemos otros momentos de oración como por ejemplo, Examen de Conciencia a medio día antes del almuerzo y por la tarde el Rosario, las Vísperas y en la noche las Completas.

Prensa: En el mundo se vive mucho sufrimiento y dolor… ¿qué las lleva a Uds. a optar por vivir una vida de sacrificio comprometiéndose de cerca con gente que sufre?

Sor Evangelina:
Nosotras tenemos la convicción de nuestra fe, de que cada hermano es el mismo “Rostro de Cristo”… entonces eso es lo que queremos, entregar nuestras vidas a Dios y a la vez en este servicio concreto.

Prensa: ¿Cuántos ancianos se ven beneficiados en el asilo? ¿En qué consiste el trabajo en el asilo?

Sor Evangelina: Actualmente son 90 ancianitos pero el asilo tiene la capacidad para 100.
El trabajo consiste en atender al anciano, darles de comer, atender su salud, sobre todo a los más enfermos. Nuestra misión es dentro del asilo.

Prensa: Muchas personas conocen ancianitos necesitados de cuidado y cariño, ¿Cómo pueden acercarse? ¿Hay algún pago por el ingreso al asilo? ¿Algunos requisitos?

Sor Evangelina: A los ancianitos los traen sus familias y les explicamos que no tenemos algún tipo de pensión que recibamos, sino que dejamos que los familiares o las demás personas colaboren con lo que buenamente puedan dar en conciencia. Algunos pueden y otros no.
Además buscamos apoyo para que nuestros ancianitos estén bien atendidos y no les falte nada de lo necesario. Para eso las hermanitas salimos de dos en dos por los diferentes lugares, buscando la colaboración de personas de buena voluntad que quieran apoyar y poder así sostener el hogar. Gracias a Dios, sí encontramos respuesta.

Prensa: Las personas que quieran comprometerse con este proyecto ¿Cómo podrían hacerlo? ¿En qué necesitan apoyo?

Sor Evangelina: Actualmente lo que estamos necesitando son pañales y víveres, sobre todo tenemos urgente necesidad de leche y azúcar.

Muchas jóvenes han visto la labor que realizan las Hermanitas de los ancianos desamparados y han tenido la inquietud de querer servir a los más necesitados. Ellas empiezan a conocer la misión de esta congregación viviendo en la comunidad por un periodo de tiempo, y si sienten el llamado a esta vocación, ingresan a alguna de las casas de aspirantado.
Actualmente en el asilo de Piura, 11 jóvenes están conociendo la labor de la congregación mientras que 100 ya están discerniendo la vocación en las casas de aspirantado.
Casa de Trujillo
40 aspirantes.
Casa de Cajamarca
30 aspirantes.
Casa de Arequipa
30 aspirantes.
A continuación les ofrecemos una entrevista realizada a la superiora de la congregación, Hermanita Evangelina Muñoz Terrones.

Prensa: ¿Hace cuánto tiempo se encuentran en Piura? ¿Cuántas personas conforman la comunidad?

Sor Evangelina: La congregación en Piura se encuentra 50 años y somos 9 religiosas.
Prensa: ¿Quién es el fundador y cómo surge la congregación? ¿En qué lugares se encuentran?
Sor Evangelina: Los fundadores son Santa Teresa de Jesús Jornet y el Siervo de Dios, D. Saturnino López Novoa, que empezaron la congregación en Valencia, España el año 1873.
Tenemos muchas casas en España, en América Latina y últimamente en Asia.
En Perú estamos en Lima, con dos casas de retiro (camino a Canta), y congregaciones en Arequipa, Trujillo, Cajamarca y Piura.

Prensa: ¿En qué consiste la labor que realizan? ¿Cuál es su carisma y apostolado?

Sor Evangelina: Nuestra misión como religiosa es nuestra vida consagrada a Dios y luego nuestra misión con los ancianos es atenderlos especialmente a los más pobres y abandonados.
El fin es sanar sus cuerpos para poder salvar sus almas, que es lo que nos recomendaba nuestros fundadores.
Les damos toda la atención que necesitan desde que se levantan, ayudándo a los que no pueden pararse por sí mismos, les hacemos la limpieza de las habitaciones y todos los cuidados directos con el anciano.

Prensa: ¿Qué significa ser Hermanitas de los ancianos desamparados?

Sor Evangelina: Nuestro fundador quiso que nos llamásemos hermanitas, porque nos decía que debíamos considerarnos como las sirvientes de los ancianitos.
Así como en una casa a los más pequeños les decimos hermanitas, así nosotras debemos ser las más pequeñas para servir.

Prensa: ¿Cómo es un día en la vida de una hermanita de los ancianos desamparados?

Sor Evangelina: Un día… en algo varía en cada congregación. Pero un día acá en la casa de Piura: nos levantamos a las 4:30 de la mañana, rezamos Laudes y luego tenemos una hora de oración personal. Continuamos con la Santa Misa. Hacemos nuestra oración primero para ofrecer a Dios nuestro trabajo del día.
Y luego empezamos con nuestra labor con los ancianitos.
Claro que durante el día tenemos otros momentos de oración como por ejemplo, el Examen de Conciencia a medio día antes del almuerzo y por la tarde el Rosario, las Vísperas y en la noche las Completas.

Prensa: En el mundo se vive mucho sufrimiento y dolor… ¿qué las lleva a Uds. a optar por vivir una vida de sacrificio comprometiéndose de cerca con gente que sufre?

Sor Evangelina: Nosotras tenemos la convicción de nuestra fe, de que cada hermano es el mismo “Rostro de Cristo”… entonces eso es lo que queremos, entregar nuestras vidas a Dios y a la vez en este servicio concreto.

Prensa: ¿Cuántos ancianos se ven beneficiados en el asilo? ¿En qué consiste el trabajo en el asilo?

Sor Evangelina: Actualmente son 90 ancianitos pero el asilo tiene la capacidad para 100.
El trabajo consiste en atender al anciano, darles de comer, atender su salud, sobre todo a los más enfermos. Nuestra misión es dentro del asilo.

Prensa: Muchas personas conocen ancianitos necesitados de cuidado y cariño, ¿Cómo pueden acercarse? ¿Hay algún pago por el ingreso al asilo? ¿Algunos requisitos?

Sor Evangelina: A los ancianitos los traen sus familias y les explicamos que no tenemos algún tipo de pensión que recibamos, sino que dejamos que los familiares o las demás personas colaboren con lo que buenamente puedan dar en conciencia. Algunos pueden y otros no.
Además buscamos apoyo para que nuestros ancianitos estén bien atendidos y no les falte nada de lo necesario. Para eso las hermanitas salimos de dos en dos por los diferentes lugares, buscando la colaboración de personas de buena voluntad que quieran apoyar y poder así sostener el hogar. Gracias a Dios, sí encontramos respuesta.

Prensa: Las personas que quieran comprometerse con este proyecto ¿Cómo podrían hacerlo? ¿En qué necesitan apoyo?

Sor Evangelina: Actualmente lo que estamos necesitando son pañales y víveres, sobre todo tenemos urgente necesidad de leche y azúcar.