sábado, 19 de septiembre de 2009

Aniversario de la Beatificación de las Hermanitas Mártires. 22 de Septiembre . (Año 2001)

Sor Josefa de San Juan de Dios Ruano García.
Nació en la Villa de Berja (Almería) el 9 de Julio de 1854. Fue bautizada en la parroquia de la Asunción de Berja el 11 de Julio y recibió el sacramento de la Confirmación el 1 de Septiembre 1877. Ingresó en la Congregación el 8 Diciembre 1877, a los 23 años. Hizo su profesión temporal en Valencia el de marzo de 1880, y sus profesiones perpetuas 5 años más tarde.

Se desempeño como Superiora de la Casa de Cascante (Navarra), de 1916 a 1922; de la Casa de Requena (Valencia), de 1922 a 1928; de la casa de Alcira (Valencia); de 1928 a 1934; de Requena, de 1934 a 1936. Sufrió el martirio en Buñol el 8 de septiembre 1936. Beatificada por Juan Pablo II el 11 de marzo de 2001.


Sor Dolores de Santa Eulalia Puig Bonany.
Nació en Berga (Barcelona) el 11 de Julio de 1857. Fue bautizada el mismo día de su nacimiento. Su confirmación la realizó el 29 de abril, en la parroquia de Santa Eulalia de Berga. Ingresó en la Congregación: el 25 de septiembre de 1886. Vistió el Santo Hábito, en Valencia el 27 de enero de 1887 e hizo su profesión trienal el 27 de enero de 1889.


Sus superioras la enviaron a la Casa de Villena en Alicante el 29 Enero 1889. Posteriormente fue trasladada a la casa de Yecla (Murcia) en 1890. Hizo su profesión perpetua en Valencia el 9 de marzo de 1892, para luego ser enviada, tres días más tarde, a la casa de Requena en Valencia donde permaneció hasta su muerte. Desempeñó muchos años el oficio de portera. Era "pequeña de cuerpo, pero con un alma grande, todo el mundo la quería".


Martirio en Buñol, en Valencia, en septiembre de 1936.
Beatificada por Juan Pablo II el 11 de marzo de 2001.
Sor Cristina del Espíritu Santo Bertomeu Fuster y Sor Pascuala de la Ascensión García Garrido. (pertenecientes a la casa-asilo de Barbastro en Huesca)

Expulsadas de Barbastro en la cruenta persecución que sufrió la diócesis de Barbastro al estallar la Guerra Civil (1936-9) decidieron ir a Oliva (Valencia), de donde era una de ellas, a casa de sus familiares. Pero al llegar a Lérida, fueron reconocidas como religiosas y las hicieron descender del tren con otras dos monjas pertenecientes a otro instituto, y que se encontraban en iguales circunstancias.


Fueron conducidas a un comité, interrogadas y seguidamente fusiladas, sin que haya sido posible averiguar el lugar donde fueron enterradas. Posiblemente fueron detenidas el 14 de diciembre de 1936 (cfr. El Hábito y la Cruz. Religiosas asesinadas en la guerra civil española, G. Rodríguez, Edibesa 2006, p.424).