miércoles, 23 de mayo de 2012


CONSAGRACION DIARIA A MARIA
Oh, señora y Madre mía,
con filial cariño vengo
a ofrecerte en este día
cuanto soy y cuanto tengo:
Mis ojos para mirarte,
mi voz para bendecirte,
mi vida para servirte,
mi corazón para amarte.

Acepta, Madre, este don
que te ofrenda mi cariño
y guárdame como a un niño
cerca de tu corazón.