Debajo de tu manto
repara y verás
los desamparados
que no lo son ya.
Haced Madre mía
haced por piedad
que los ancianitos
que sepan amar.
Yo veo en tus brazos
al Niño Jesús
que tan tiernecito
ya lleva la cruz.
Si vos sois mi Madre
que podré temer
contra los ataques
que da Lucifer.